-Hola Nadine, ¡Cuánto tiempo sin verte! ¿Qué es de tu vida?
-Hola Malasombra, la verdad es que no estoy atravesando por un buen momento. Me divorcié hace poco y estoy muy cansada de relaciones de pareja.
-Escucha Nadine, tengo una solución perfecta para ti. Además aquí no te será difícil hacerlo con las leyes tan extrañas que tenéis. ¿Por qué no te casas contigo misma?
-¡Anda! Pues no es mala idea, Malasombra.
Se casa con ella misma tras divorciarse de su marido
Nadine había llegado a dos conclusiones. Una, que necesitaba un cambio radical en su vida. Y dos, que, después de su divorcio, no había nadie en el mundo que la conociera mejor que ella. Por eso decidió tomar una decisión atrevida: casarse consigo misma.
http://www.larazon.es/noticia/6233-se-casa-con-ella-misma-tras-divorciarse-de-su-marido
Mira por donde siguió mi consejo y organizó la boda. Por supuesto me invitó. Debía pensar en qué regalar a una mujer que se casa consigo misma. La verdad es que no me hace falta tener mucha imaginación para elegir un regalo adecuado. Evidentemente mi regalo debía ser sutil y delicado. Viajé hasta Brasil para conseguirlo.
Ya de vuelta acudí a la boda con mi regalo y me dediqué a lo que solemos dedicarnos la mayoría en los banquetes de boda: A ponernos hasta arriba de comida y bebida.
Después de la comilona, me senté en un sillón a esperar tranquilamente a que se me pasara la comilona y la borrachera. De pronto, mi lengua hizo un descubrimiento entre los dientes: Un trozo de carne se había atrincherado y amenazaba con no dejarme descansar. Pedí un palillo de dientes a un camarero y quedé atónito cuando me dijo que tenían. ¿Cómo podía ser? ¡Qué vergüenza!
Una vez más me puse manos a la obra y conseguí unos cuantos palillos "por ahí".
http://www.larazon.es/noticia/6233-se-casa-con-ella-misma-tras-divorciarse-de-su-marido
Mira por donde siguió mi consejo y organizó la boda. Por supuesto me invitó. Debía pensar en qué regalar a una mujer que se casa consigo misma. La verdad es que no me hace falta tener mucha imaginación para elegir un regalo adecuado. Evidentemente mi regalo debía ser sutil y delicado. Viajé hasta Brasil para conseguirlo.
Roban vibrador de oro de una sex shop de lujo
El juguete sexual está chapado en oro de 18 quilates y vale unos 4 mil dólares; el ladrón no se llevó más productos
http://www.excelsior.com.mx/index.php?m=nota&seccion=&cat=21&id_nota=838537Ya de vuelta acudí a la boda con mi regalo y me dediqué a lo que solemos dedicarnos la mayoría en los banquetes de boda: A ponernos hasta arriba de comida y bebida.
Después de la comilona, me senté en un sillón a esperar tranquilamente a que se me pasara la comilona y la borrachera. De pronto, mi lengua hizo un descubrimiento entre los dientes: Un trozo de carne se había atrincherado y amenazaba con no dejarme descansar. Pedí un palillo de dientes a un camarero y quedé atónito cuando me dijo que tenían. ¿Cómo podía ser? ¡Qué vergüenza!
Una vez más me puse manos a la obra y conseguí unos cuantos palillos "por ahí".