domingo, 23 de octubre de 2011

Malasombra en Kenia

       Me encontraba en Kenia, en la sabana, junto a un grupo de amigos. Una manada de leones a la que me había unido con la intención de cazar un impala.
       Nos encontrábamos acechando a un grupo de cornudos impalas. Lo de cornudos es porque tienen cuernos de verdad, no es despectivo. Una leona dirigía la cacería. Según me explicaron, son las hembras las que suelen cazar. Los machos ayudan a veces, pero generalmente sólo se incorporan cuando la presa está cazada para comer. Intenté hacer lo mismo, como macho que soy, pero una de las leonas me dio un zarpazo y tuve que claudicar. No me quedaba más remedio que obedecer.
       Nos acercábamos cada vez más, protegidos por la maleza para no ser vistos. Teníamos el viento en contra, lo cual es bueno para no ser detectados por los impalas. Los músculos en tensión, esperando el momento oportuno para lanzar el ataque. De pronto un león adolescente se levantó e inició la persecución. Fue precipitado, aquellos bichos corrían demasiado y perdimos la oportunidad. Sin duda la falta de experiencia nos había jugado una mala pasada. Le pregunté a la leona jefa y me dijo que debiamos esperar unas cuantas horas hasta tener otra ocasión.
       -Señora leona, ¿se ha vuelto loca? Yo tengo hambre y no pienso esperar mucho tiempo.
       -Amigo Malasombra- me dijo- es la ley de la sabana. Si tiene usted una idea para comer antes, apórtela y se lo agradeceremos.
       -Por supuesto que sí. A ustedes los leones, ¿les gusta el jamón y los embutidos?
       -La verdad es que no los hemos probado, ¿de qué animal proceden?
       -Del cerdo, que no deja de ser un jabalí domesticado.
       -Entonces seguro que nos gusta.
       -Pues esperen un rato que voy a mi país, les traigo un cargamento y así nos alimentamos todos.
       Monté en mi submarino y regresé a España para cumplir mi promesa. Por cierto si os habéis tragado que puedo hablar con leones, no importa que os diga que viajo a Kenia en submarino y que apenas tardo unos minutos en ir y volver.. Me acerqué a un pueblo de Avila y convencí a uno de mis esbirros para que se quedase en un camión y fuese detenido. Así, las sospechas no caerían sobre mí. Luego le pagaría la fianza...bueno, eso es lo que le dije, otra cosa es que lo cumpla..
       Al poco tiempo estaba de vuelta con mi cargamento. Nos reunimos todos a la sombra de un árbol y dimos buena cuenta de aquellos ricos manjares. Los leones me dieron las gracias y nos echamos una siesta histórica. Sin duda aquellos felinos se lo montaban bien: Comer, dormir y reproducirse. Nada más. Si no fuera porque a mí me gusta hacer el mal para divertirme y a ellos no, me hubiese unido a la manada para siempre.

Roban un camión en Ávila cargado con 210 jamones y 220 chorizos

ÁVILA, EUROPA PRESS

Un hombre de 42 años ha sido detenido por un delito de robo con fuerza en las cosas acusado de sustraer en Navatalgordo (Ávila) un camión de productos cárnicos cargado con 210 jamones, 170 lomos y 220 chorizos y salchichones, según fuentes de la Benemérita.

http://www.laopiniondezamora.es/sucesos/2011/10/05/roban-camion-avila-cargado-210-jamones-220-chorizos/550022.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario